MADRID 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, ha alertado este miércoles ante la Asamblea General de Naciones Unidas sobre la "tragedia humana sin precedentes" que vive Haití y ha apremiado al Consejo de Seguridad a que apruebe la propuesta de Estados Unidos y Panamá para fortalecer la presencia de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) en el país centroamericano, cuyo mandato expira este 2 de octubre.
"Hacemos un llamamiento urgente a los miembros del Consejo de Seguridad, en especial a los cinco permanentes, a adoptar esta resolución sin demoras. Debemos ser conscientes de que el mandato de la MSS expira el 2 de octubre, estamos frente a un período de transición delicado que exige garantizar legitimidad a todo el contingente actual de la misión", ha declarado, manifestando su apoyo al plan de Managua y Washington para hacer de la MSS "una fuerza que logre imponer orden y reestablecer la paz".
Abinader ha subrayado que la propuesta incluye "una estructura de mando reforzada, metas claras y evaluables, y el apoyo logístico y operativo de una oficina bajo el mando de Naciones Unidas" en su país vecino, además de que "establece una presencia más robusta, con mayor coordinación, supervisión y estándares de rendición de cuentas, tanto en Derechos Humanos como en desempeño operativo".
El mandatario dominicano ha lamentado que la misión aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU en octubre de 2023 "aún no ha alcanzado la escala necesaria, número de efectivos y la financiación adecuada, por lo que no ha alcanzado sus objetivos", si bien ha agradecido "el liderazgo de Kenia, Jamaica, Belice, Bahamas, Guatemala y El Salvador, y el apoyo financiero de Estados Unidos, Canadá y otros países que han hecho posible el despliegue inicial".
En su intervención, ha denunciado que los haitianos enfrentan "una tragedia humana sin precedentes: violencia extrema, colapso institucional y control territorial de numerosas bandas criminales que aterrorizan a la población", una situación que "representa una grave amenaza a la paz y la seguridad" para el país y el resto del continente.
Abinader ha advertido de su posición fronteriza "del colapso haitiano", tras lo que ha pedido a los países del continente "respaldo político financiero y operativo" en este aspecto. "Se trata de un país de nuestra región, que exige una responsabilidad compartida como vecinos", ha agregado.
Pese a ello, el dirigente ha asegurado que las autoridades dominicanas seguirán "protegiendo su integridad territorial y haciendo valer su régimen migratorio nacional" y ha defendido esta política señalando que su objetivo es "garantizar la seguridad de sus ciudadanos". "No podemos cargar solos con el peso de una crisis que desborda cualquier capacidad nacional. No es sostenible, ni seguro para nadie. Cada día de inacción aleja la solución a la crisis", ha concluido.
A principios de 2024, una oleada de violencia sacudió Haití, lo que llevó al entonces primer ministro, Ariel Henry, a presentar su dimisión. Entre críticas y tras varios años de inestabilidad, había ascendido al puesto en 2021 tras la muerte del presidente Jovenel Moise en su residencia oficial a manos de un grupo de sujetos armados.
Desde el año pasado, se ha creado un Consejo Presidencial de Transición con el objetivo de llevar a cabo la tarea de pacificación y crear un Consejo Electoral Provisional para organizar las primeras elecciones en una década.