La ONU insta a las partes a "abstenerse de cualquier forma de violencia"
MADRID, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ejército de Ecuador ha anunciado este martes la liberación de cuatro del total de 17 militares que fueron retenidos este domingo en la provincia norteña de Imbabura, epicentro de las protestas del paro nacional indefinido convocado por las organizaciones indígenas, mientras escoltaban un convoy humanitario liderado por el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa.
El cuerpo militar ha confirmado la liberación de los cuatro soldados que habría tenido lugar este lunes a las 20.00 horas (hora local) en la iglesia San Francisco, en la localidad de Cotacachi, según fuentes gubernamentales citadas por el diario 'Primicias'.
Las Fuerzas Armadas han procedido al examen médico de los efectivos liberados, mientras que de los 13 restantes no han brindado información hasta el momento.
El organismo ha presentado este mismo martes una denuncia ante la Fiscalía por "secuestro" de su personal, en un caso que ya ha asumido el órgano especializado en delincuencia organizada transnacional e internacional.
El Ejecutivo ecuatoriano denunció a principios de esta semana un ataque violento contra un convoy de ayuda humanitaria por manifestantes en Cotacachi, formado por unos 100 vehículos militares y civiles y encabezado por Noboa y varios de sus ministros.
Los militares retenidos formaban parte de un grupo de 50 que escoltaba el convoy, emboscado por unas 350 personas que lanzaron cócteles molotov contra los vehículos.
Ese mismo día en Cotacachi, murió por disparos de las fuerzas de seguridad el comunero indígena Efraín Fueres, presumiblemente la primera víctima mortal del paro convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y que este martes cumple nueve días.
La organización indígena ha denunciado "una masacre planificada, un crimen de Estado" por el uso de "balas reales, dinamita y armamento letal" por parte de los militares contra los indígenas. Por su parte, el Ministerio de Defensa ha informado de al menos doce militares heridos desde el inicio de las protestas.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha manifestado este martes su "profunda" preocupación ante la "violencia" que están adquiriendo las movilizaciones en el país latinoamericano, incluyendo la muerte del líder comunero.
Así lo ha dicho su portavoz, Stéfane Dujarric, durante una rueda de prensa indicando que el representante de la ONU insta al "pleno respeto de los Derechos Humanos" y hace un llamamiento a "todos" los actores para que "se abstengan de cualquier forma de violencia" y en su lugar traten de "resolver las disputas mediante un diálogo inclusivo".