BOLIVIA, 16 Sep (EUROPA PRESS)
El exmandatario boliviano Evo Morales negó este lunes su involucramiento en las protestas dirigidas contra la administración de Luis Arce, contrariamente a lo afirmado por este último en un reciente mensaje televisado. Dentro de sus declaraciones, Morales acusó al presidente Arce de manipulación hacia la opinión pública y de inacción frente a la corrupción y crisis que precipitaron dichas manifestaciones.
Según Morales, la desesperación y confusión marcan la conducta actual de Arce, quien lo señaló como el promotor de las protestas y sugirió que estas podrían escalar hacia un intento de golpe de Estado. "El presidente Arce no solo estuvo desesperado, sino también confundido", expresó Morales a través de su perfil en X, respondiendo a las acusaciones que lo implican en los disturbios.
Morales defendió el carácter legítimo y popular de las movilizaciones, argumentando que estas no buscan beneficiar a una figura en particular, sino expresar el hartazgo colectivo ante un gobierno que, a su ver, ha fallado en combatir la corrupción y en abordar efectivamente la actual crisis. "La marcha para 'Salvar Bolivia' no es para favorecer a una persona, como falsamente dice Luis Arce; es la respuesta de un pueblo cansado de un gobierno inconsciente", declaró.
Este intercambio de acusaciones subraya la creciente tensión política en Bolivia, donde las voces críticas contra el gobierno de Arce cobran fuerza, evidenciando un escenario de descontento y desafío hacia la gestión actual.