MADRID 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Argentina, Javier Milei, ha subrayado que no tiene "la más mínima intención" de conceder un indulto a la exmandataria Cristina Fernández, bajo arresto domiciliario tras ser condenada por delitos de corrupción, y ha afirmado que esta posibilidad es un "disparate", ya que considera que iría en contra de la independencia judicial que propugna.
De hecho, Milei ve la condena contra Fernández, que incluye seis años de encierro e inhabilitación política perpetua, como "una lección de republicanismo", ya que evidencia que una mujer que durante años alcanzó las principales cotas de poder también puede terminar rindiendo cuentas ante los tribunales argentinos.
"Yo vivo pregonando la independencia de la justicia, que la justicia falle y haga lo que considera pertinente", ha dicho el actual presidente, al rechazar cualquier posible medida de gracia en una entrevista con 'La Nación +'. En este sentido, se ha retrotraído a un mensaje que lanzó en la campaña previa a las últimas elecciones: "El que la hace, la paga".
Milei ha querido distanciar su supuesta imparcialidad con respecto a las causas judiciales con las injerencias en las que, a su juicio, incurrieron "todos" los gobiernos previos. Una interferencia de la que el actual presidente también culpa a la administración dirigida por Fernández, al frente de "uno de los peores gobiernos de la historia" según Milei.
Cristina Fernández comenzó esta misma semana a cumplir su pena, aunque el tribunal ha accedido a que lo haga en su vivienda de Buenos Aires en lugar de en una cárcel. Los jueces le han autorizado incluso que pueda asomarse al balcón, aunque le han emplazado a hacerlo con "prudencia y sentido común", después de que en los últimos días simpatizantes kirchneristas se hayan movilizado en la capital argentina como señal de apoyo.