WASHINGTON 17 Jun. (Reuters/EP) -
Altos cargos estadounidenses y cubanos tienen previsto reunirse esta semana para debatir la posibilidad de reanudar los servicios de correo directo entre ambos países después de una prohibición que se ha extendido durante 50 años.
Diplomáticos y representantes del servicio postal de ambas naciones se reunirán este martes y este miércoles en Washington para hablar sobre este asunto, pese a un enfriamiento de sus relaciones por un tema de detenidos, ha indicado la agencia de noticias Associated Press (AP), citando a un funcionario estadounidense no identificado.
De acuerdo con AP, el funcionario ha asegurado que los congresistas serán informados del desarrollo de la reunión a partir de este lunes.
El servicio de correo directo entre Estados Unidos y Cuba se encuentra suspendido desde 1963. A pesar de la prohibición, las cartas y otro tipo de correspondencia sigue existiendo entre ambos países a través de terceros, prosigue.
Las negociaciones están en línea con el interés de Estados Unidos de promover "el libre flujo de la información hacia, desde y dentro de Cuba", ha declarado el funcionario a AP.
Estas negociaciones se reanudan en medio del estancamiento que ha sufrido el proceso para que las autoridades cubanas liberen al subcontratista estadounidense Alan Gross, quien cumple una pena de 15 años de cárcel en la isla.
EL CASO GROSS
Gross, de 63 años de edad, fue detenido en diciembre de 2009 en La Habana cuando estaba trabajando para la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID) con el fin de facilitar el acceso a Internet a la comunidad judía en Cuba.
Tras permanecer dos años en prisión preventiva, en marzo de 2011 fue condenado a 15 años de cárcel por llevar a cabo "actos contra la independencia o la integridad del Estado cubano", por introducir equipos de comunicación satelital, algo prohibido en el país.
Desde entonces, Estados Unidos ha solicitado insistentemente a Cuba que libere a Gross por razones humanitarias, ya que, según argumenta, se encuentra gravemente enfermo.
El caso Gross puso fin a un breve periodo de distensión en las relaciones bilaterales, propiciado por la llegada a la Casa Blanca de Barack Obama, que flexibilizó el embargo comercial impuesto a la isla desde hace más de medio siglo al permitir que los cubano-estadounidenses puedan viajar libremente y enviar remesas a su país.
En ocasiones, Cuba ha hecho alusión a que una posibilidad sería el canje de Gross por cinco agentes cubanos detenidos en Estados Unidos por espionaje, el conocido