BOLIVIA, 20 Dec (EUROPA PRESS)
Este jueves, las autoridades bolivianas emitieron una alerta migratoria contra el expresidente Evo Morales, respondiendo así a una imputación y orden de arresto emitidas en su contra por un supuesto delito de trata de personas. El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, comunicó a la prensa, citando información de la Agencia Boliviana de Información (ABI), que "se emitió un requerimiento fiscal que ya fue puesto en conocimiento de la Dirección General de Migración".
Del Castillo enfatizó que la Policía se adhiere estrictamente al cumplimiento de la Constitución Política del Estado, las leyes vigentes y las determinaciones judiciales, sin entrar en deliberaciones. Por su parte, el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, reveló que, siguiendo el comunicado de la Dirección General de Migración, todas las dependencias pertinentes, incluyendo la unidad policial de control migratorio y los puntos fronterizos, fueron alertados acerca de Morales. Este anuncio fue recogido por 'El Correo del Sur'.
En respuesta a las declaraciones de los simpatizantes de Morales, quienes aseguran que se encuentra protegido por un "grupo de élite" y advierten posibles consecuencias violentas en caso de intentar su detención, Ríos hizo un llamado al respeto por el proceso judicial, argumentando la importancia de no politizar este asunto.
Según el plan de las autoridades, una vez Morales sea localizado, la Fiscalía de Bolivia solicitará contra él seis meses de prisión preventiva. Se le denuncia por haber mantenido en 2015 una relación con una menor de edad, quien actualmente también está en paradero desconocido y con quien tendría una hija.
Además, se informó que los padres de la menor están acusados de tráfico de seres humanos, al haber consentido dicha relación a cambio de beneficios políticos. Se solicitó el arresto de la madre de la menor, mientras que el padre ya se encuentra detenido desde octubre. A estos, al igual que a Morales, también se les activó la alerta migratoria.